Jeff Hastings, DIRECTOR GENERAL
Con unos costes energéticos que aumentan a 30% año tras año, las empresas están cada vez más preocupadas por reducir el consumo. La señalización digital está muy por debajo de la calefacción, la iluminación y el aire acondicionado en cuanto a consumo de energía en la mayoría de oficinas y comercios. Sin embargo, las pantallas son muy visibles y la cantidad de energía que consumen puede ser significativa. Una pantalla puede consumir 190 W. Si añadimos el reproductor multimedia, nos encontramos con $400 al año por pantalla, lo que puede suponer miles de euros incluso para una red pequeña en una cadena de tiendas regionales. La buena noticia es que hay medidas sencillas que se pueden tomar para reducir la energía utilizada por la señalización sin que ello afecte a su eficacia. He aquí cinco formas de minimizar el consumo de energía de su red de señalización digital:
1. Elige una pantalla de bajo consumo.
Es probable que la pantalla sea el mayor consumidor de energía de su sistema de señalización digital. Si hace tiempo que no sustituye sus pantallas, considere la posibilidad de hacerlo ahora. La tecnología avanza rápidamente, y las nuevas pantallas LCD y LED son mucho más eficientes energéticamente que las disponibles incluso hace unos años. Antes de elegir una pantalla, compare el vataje de los distintos modelos y busque funciones de ahorro de energía. Una pantalla que consuma 10W más puede costar $30 más al año.
2. Apágalo cuando no lo necesites.
¿Qué puede hacer para reducir la cantidad de energía que consumen sus pantallas? Programar el apagado de los escaparates cuando no se utilizan es un primer paso importante. La mayoría de las oficinas apagan la señalización fuera del horario laboral, pero muchos comercios mantienen los escaparates encendidos toda la noche. Con cada vez más clientes preocupados por el cambio climático, tener escaparates muy iluminados con grandes carteles que dan a una calle vacía ya no es necesariamente una buena imagen. Alemania y España son dos los países que actualmente han ordenado que la señalización se apague entre las 10 de la noche y las 6 de la mañana.
Un reproductor multimedia de señalización digital bien diseñado ofrece muchas vías para programar los tiempos de encendido y apagado. Un puerto HDMI puede utilizar comandos CEC para controlar la pantalla, lo que permite apagarla dentro de la programación de contenidos. Además, se pueden utilizar mensajes UDP (mensajes de red), serie o incluso HTTP para controlar las pantallas. Otras opciones incluyen el uso de sensores de presencia para detectar espectadores, o controles táctiles para permitir a los usuarios activar las pantallas.
3. Gestiona el brillo.
Cuando revises las especificaciones de una pantalla, verás que la mayoría de los fabricantes no dan una cifra única de consumo energético: ofrecen un mínimo y un máximo. ¿Qué determina si una pantalla funciona en el extremo inferior o superior de su rango de consumo? Un factor importante es el nivel de brillo. Evidentemente, la pantalla debe ser lo bastante brillante para atraer a los espectadores y permitirles acceder cómodamente al contenido. Sin embargo, la luminosidad óptima varía a lo largo del día. Las pantallas con controles automáticos de luminosidad ajustan su brillo a las distintas horas y niveles de luz, mejorando el confort del espectador y ahorrando energía. Reducir el brillo de la pantalla puede reducir el consumo de energía hasta en 20%.
4. Tenga en cuenta el contenido.
Otro factor importante es el propio contenido. Las pantallas Direct View LED pueden consumir menos energía si el contenido se crea en el llamado "modo oscuro", lo que significa que tiene un menor contraste y se basa principalmente en paletas de colores oscuros. Un píxel negro en una pantalla Direct View LED consume menos energía que un píxel blanco.
También en lo que se refiere al contenido, la señalización puede contribuir en gran medida a otras medidas de ahorro energético en la empresa. Con pantallas digitales en forma de cuadros de mando energéticos, puede inspirar o fomentar entre sus empleados el tipo de comportamiento necesario para ser más sostenibles. Estos paneles muestran el consumo de energía en tiempo real y animarán a su equipo a ahorrar más.
5. Considera al jugador
Aunque el dispositivo de reproducción multimedia es sin duda un factor menor que la pantalla en términos de consumo de energía, sigue siendo importante, y vale la pena poner el consumo de energía en su lista de consideraciones al elegir un reproductor.
En todos los casos, un reproductor diseñado específicamente es la solución más eficiente desde el punto de vista energético, ya que no habrá ningún componente en el reproductor que sea innecesario y no contribuya directamente a la experiencia de señalización digital. La CPU, la memoria, los descodificadores de vídeo, audio e imagen y los puertos de E/S se combinan en la plataforma para obtener exactamente la potencia que necesitan. Estos reproductores también se basan en un sistema operativo específico que dirige el hardware específicamente para las experiencias de señalización digital. Los mejores reproductores específicos no tienen ventilador. Piensa en esto: un ventilador utiliza electricidad para deshacerse del calor generado por la electricidad en primer lugar.
Conclusión
Tomando unas sencillas medidas, las organizaciones pueden conseguir importantes ahorros de costes y, al mismo tiempo, luchar contra los efectos del cambio climático.